Santo Tomé / Santa Fe, 14 de septiembre de 2025 – Cada 15 de marzo se conmemora en Argentina el Día Nacional de la Persona con Hipoacusia, con el objetivo de visibilizar las barreras que enfrentan quienes presentan pérdida parcial de audición y promover su inclusión social. En este marco cobra relevancia el bastón verde, un elemento todavía poco difundido pero de gran valor simbólico y práctico.

Este bastón identifica a personas con hipoacusia o sordera parcial, diferenciándose del bastón blanco, utilizado por personas ciegas, y del bastón verde y blanco, propio de quienes tienen sordoceguera. Su uso es voluntario y permite que la comunidad y los servicios públicos reconozcan que la persona puede requerir apoyo en la comunicación, ya sea a través de gestos, lectura labial, habla clara o dispositivos auditivos.

A diferencia de los bastones destinados a la movilidad, el bastón verde cumple una función de identificación y concientización. Advierte que la persona puede no percibir alarmas, timbres, bocinas o instrucciones verbales en distintos espacios, como la vía pública, el transporte o lugares de atención al público. Especialistas destacan que su mayor valor radica en la sensibilización social, al fomentar empatía y derribar prejuicios en torno a la discapacidad auditiva.

El bastón verde ya se utiliza en varios países de Europa y América Latina. En Argentina, asociaciones de personas con hipoacusia impulsan campañas para lograr su reconocimiento cultural y normativo. En Santa Fe, colectivos vinculados a la discapacidad auditiva han comenzado a difundirlo a través de actividades educativas y comunitarias.

Aunque no reemplaza la necesidad de políticas públicas en accesibilidad comunicacional —como intérpretes de lengua de señas, subtitulado en medios o sistemas de alerta visual—, el bastón verde se consolida como un símbolo que recuerda que la discapacidad auditiva no es invisible y que la sociedad puede contribuir activamente a generar entornos más accesibles.